Manejar bien la crítica es una señal de madurez emocional y espiritual. Si es constructiva, debemos aceptarla y gestionar los cambios necesarios para mejorar, pero cuando no lo es, hay sacarla inmediatamente de nuestra mente sin dejar que nos afecte. Y tú, ¿cómo la manejas?
Es fácil meditar en el mal comentario, pero no debemos darle más importancia de la necesaria ni permitir que nos dé vueltas en la cabeza. Me tomó tiempo entender que siempre estaremos propensos a la crítica destructiva. Por lo tanto, debemos manejar la situación con sabiduría de acuerdo a la Biblia.
Cuando estamos confiados en nuestra posición como hijos de Dios, comprendemos el valor que tenemos en Jesús. Sabemos que somos aceptados y que estamos sentados junto a Él en lugares celestiales. Si estamos seguros de esto, no seremos susceptibles a las pedradas. Ninguna persona puede destruir nuestro valor. Nadie sino Jesús podría condenarnos, sin embargo, no lo hace. “Por lo tanto, ya no hay ninguna condenación para los que están unidos a Cristo Jesús”. Romanos 8:1
A continuación puedes escuchar la tercera parte de la serie devocional “Dar y recibir crítica”, un mensaje de The Christian Working Woman en español por Mary Lowman. Si te interesa escuchar la serie completa visita nuestra lista de reproducción en Spotify o también puedes encontrarnos en plataformas como Soundcloud.
