Estoy segura que podemos tener opiniones distintas con respecto al tema de si lo cristianos podemos o no  vestir a la moda, pero constantemente recuerdo que mi opinión o la opinión de otro puede ser equivocada, así que debo saber lo que la Biblia dice al respecto.

Pablo escribió en 1 Timoteo 2:9: “En cuanto a las mujeres, quiero que ellas se vistan decorosamente, con modestia y recato, sin peinados ostentosos, ni oro, ni perlas, ni vestidos costosos”. Así que tenemos nuestros lineamientos, pero surgen diferencias en cuanto a nuestra interpretación de lo que implica vestir con modestia. ¿Cómo saber dónde trazar la línea? Esta lucha la tiene Fran, comenzó el Domingo cuando una cantante se presentó vestida con una falda muy corta y blusa apretada. Fran pensó que eso no era apropiado para cantar frente a la iglesia pero, ¿aplica lo mismo cuando se trata del trabajo?

Pues bien, un día Fran decide ir al trabajo con una falda tan corta como la de la cantante en la iglesia, se enoja porque se siente culpable por vestir de acuerdo a la moda. Sale hacia el trabajo incomoda y a la defensiva. Llega a la oficina y tiene unos minutos para alistar su presentación, llegan los clientes y se reúnen todos en la sala de conferencia y ella hace bien su presentación, tanto que el cliente queda impresionado. Ella se sienta al lado del presidente quien le hace más preguntas, y en ese momento se da cuenta de que constantemente tiene que halar su falda. Fran parece estar preocupada por lo corta que se hace su falda al sentarse – ¿será que el cliente también lo noto?, pues parece que sí – piensa ella.  Fran se siente desanimada por no haber escuchado a Jesús cuando se sintió incómoda en la mañana colocándose el vestido. Luego piensa, “¿pero qué hay de malo?” Acabo de comprar un vestido muy bonito y lo único que hice es estrenarlo”. 

Después de la presentación Fran regresa a su oficina y su amiga Luisa le pregunta: “¿Qué pasó, te salió mal la presentación?” 

Ella  levanta la cabeza y dice: “me fue bien, pero escucha, dime qué piensas tú, ¿es muy corta esta falda?” Fran se coloca de pie y da la vuelta para que Luisa la observe.

 “Oh, qué vestido más bonito, Fran, me encanta ese color, te queda muy bien” dice su compañera. 

Pero Fran insiste: “dime, ¿es muy corto?”

A lo que Luisa opina: “Pues no es más corto que todos los demás” 

“¿Pero es muy corto para mí, eso quieres decir?”

Y es aquí donde Luisa es tajante y responde: “Eso no es algo que yo debo decidir, es un tema entre Jesús y tú”.

Y tú… qué piensas al  escuchar esta historia? ¿Es muy corta la falda de Fran? ¿Es esto un tema espiritual entre ella y Jesús? Espero que escuches los próximos devocionales para descubrir a dónde nos conduce este tema.

A continuación puedes escuchar la segunda parte de la serie devocional “¿Está mal que un cristiano vista a la moda?”, un mensaje de The Christian Working Woman en español por Mary Lowman. Si te interesa ver más contenido como este no dudes en visitar nuestra lista de reproducción en Spotify o también puedes encontrarnos en plataformas como Soundcloud.