¿Cómo calificarías tu satisfacción laboral? ¿Te gusta tu trabajo? Nos cuentan que son pocas las personas a las que les gusta su trabajo. Esto no lo escribo porque crea que tengo el trabajo más glamoroso del mundo, más bien es porque sé que estoy donde Dios quiere que yo esté, haciendo lo que él desea que yo haga y así incluso lo más rutinario tienen significado, aunque sea algo muy básico.
No es emocionante sentarme a escribir para este programa o para un libro, al contrario, es trabajo duro. La mayoría de veces me obligo a escribir. Debo forzar la disciplina, de lo contrario, me ocupo con toda clase de cosas para evitar escribir. Pero, me encanta comunicar, entonces debo escribir.
Aquí, en las oficinas de The Christian Working Woman, además de mí, tenemos un personal de tres mujeres dedicadas. Así que todas debemos hacer de todo para lograr el trabajo. Yo también hago muchas de las tareas repetitivas. Mucho de nuestro trabajo son tareas básicas que se deben hacer y yo puedo hacerlas igual como cualquier otra persona.
Las tareas básicas de un trabajo nos pueden enseñar muchas cosas, la humildad, el servicio, y perseverar hasta concluir con una tarea… ¿Sabes? Si esas tareas rutinarias se hacen para la gloria de Dios, se convierten en momentos de adoración para cantarle y adorarlo.
Anteriormente, para ganar la vida debía entrenar empresarios, varios aspectos de este trabajo no me gustaban, por ejemplo: los muchos viajes; pero comprendí que en esos viajes Dios me daba tiempo para afilar mis habilidades y poder manejar mejor este ministerio.
Aprendí a sacar de mi mente los aspectos negativos y agradecer a Dios su bondad. Cualquier trabajo puede ser significativo si lo haces para la gloria de Dios, quizás no te sientas realizado como lo define el mundo, pero la verdad es que en ningún trabajo podemos encontrar una realización completa; eso solo lo puede dar Jesús.
Como creyentes en Jesús esta es la gran ventaja que tenemos, podemos hacer todo como para Dios. Todo se trata de nuestra actitud. Si tú quieres tener un trabajo significativo, debes hacerlo como para Dios; esto le complacerá a él.
Así que para concluir, ¿es necesario tener entonces trabajos que nos hagan sentir plenos? No, pero si es necesario que estemos donde Dios quiere que estemos; esto da significado a nuestro trabajo. Sabrás, que sea lo que sea que hagas, tendrá mérito, y no pasará desapercibido, cuando hagas tu trabajo como para él.
A continuación puedes escuchar la quinta parte de la serie devocional “Satisfacción o plenitud laboral”, un mensaje de The Christian Working Woman en español por Mary Lowman. Si te interesa escuchar la serie completa visita nuestra lista de reproducción en Spotify o también puedes encontrarnos en plataformas como Soundcloud.