En todo tiempo Dios es bueno, esto significa que Él es virtuoso, justo, moralmente excelente y claro. Ser bondadoso no quiere decir que vas a tener a todo el mundo contento, ni que cumplirás sus expectativas, significa que te enfocas en permitir que las características de Jesús, sean formadas en tu vida.
2 de Pedro 1:5-7 nos enseña, “precisamente por eso, esfuércense por añadir a su fe, virtud; a su virtud, entendimiento; al entendimiento, dominio propio; al dominio propio, constancia; a la constancia, devoción a Dios; a la devoción a Dios, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor”. Quizá tengas que cavar en lo profundo de tu corazón con sinceridad y remover aquellas cosas que no son buenas. Posiblemente debas cambiar tus hábitos al ver televisión, dejar la queja, el chisme o botar algunas revistas o novelas.
En cuanto a la fidelidad, 1 Corintios 4:2 dice, “ahora bien a los que reciben un encargo se les exige que demuestren ser dignos de confianza”. Solo servimos a Dios si somos personas fieles, quizá hayas escuchado que “la mejor habilidad es poder contar con alguien.” Eso significa fidelidad. ¿Se puede contar contigo? ¿Eres conocido como una persona fiel y cumplidor de su deber? ¿Cumples siempre tus promesas? ¿Tu palabra vale?
Un buen lema para recordar es “no prometas tanto y cumple más”. Piensa bien en lo que te vas a comprometer y luego cumple sin excusas. Permite que la bondad y la fidelidad crezcan en tu vida.
A continuación puedes escuchar la cuarta parte de la serie devocional “Una vida fructífera”, un mensaje de The Christian Working Woman en español por Mary Lowman. Si te interesa escuchar la serie completa visita nuestra lista de reproducción en Spotify o también puedes encontrarnos en plataformas como Soundcloud.