Jesús, la fuente de gracia
¿Te consideras una mujer sofisticada? Debo admitir que no soy una persona refinada. Durante las vacaciones de mi primer año en la universidad, mi mamá contrató a una tutora para darme clases de etiqueta social. Que ella gastara dinero en esas lecciones indica cuánta ayuda necesitaba. No soy una persona glamurosa, pero me alegra comunicar que [...]