¿Te has sentido estancado alguna vez?

Sin darnos cuenta, muchas veces caemos en la rutina y en tendencias que no nos dejan avanzar ni sacar todo nuestro potencial. Estos esquemas se nos transforman en pequeñas jaulas que no nos permiten crecer si son demasiado rígidos. Y ahí es cuando debemos decidir hacer algo para cambiarlos. ¿Quieres saber cómo hacerlo? ¡Continúa leyendo!

Lo principal es saber que no todo esquema es malo, porque sin ellos no sabríamos cómo comportarnos en situaciones determinadas, ni podríamos poner un orden a lo que hacemos en el día a día. Pero la clave está en mantener una mente abierta para lograr aprender y desaprender cada día. En suma, ser individuos dispuestos a salirnos de lo común, que es lo fácil, para atrevernos a ser diferentes.

PARA TENER EN CUENTA…

Dar saltos de fe. Es importante que de vez en cuando, estemos dispuestos a salirnos de lo cómodo para adentrarnos en lo desconocido. Cuando hagamos pequeñas cosas que nos signifiquen un cambio, nuevas ideas vendrán a nuestra mente y podremos alcanzar nuevas cosas.

Comienza con lo pequeño. No es necesario hacer cambios radicales de la noche a la mañana, sólo pequeñas cosas que cambien tu rutina te darán la inspiración necesaria para salir de lo que te limita: hablar con nuevas personas, cambiar tu sitio de trabajo, caminar de regreso a casa, practicar un nuevo deporte…en fin. ¡La lista es interminable!